SÓLO TIENES UNA MUERTE
Miércoles, Marzo 28th, 2007LOU CARRIGAN
LOU CARRIGAN
Podemos empezar por reflexionar sobre lo que sigue más abajo. ¿Realmente son verdades? Tal vez reflexionando lleguemos a alguna conclusión al respecto. En breve ofreceré un texto bastante mas sustancioso. Por el momento, vamos a ver si sacamos algo en claro de las siguientes verdades…
En noviembre de 2002 Ediciones Robel publicó un precioso volumen de 510 páginas y encuadernado con tapa dura además de una sobrecubierta espléndida a todo color. En dicho volumen se recogían las colaboraciones de un buen número de escritores de Ciencia Ficción, entre los cuales me encontré yo, distinción que agradecí en su día y que sigo agradeciendo. Como prueba de ello y de mi grato recuerdo de aquellos días en que conocí a un editor amable e incluso simpático, reproduzco aquí mi aportación a aquel volumen, dedicado especialmente a los amantes de este género que cuenta con tantísimos adeptos en todo el mundo.
JUSTICIA PERSONAL
Relato inédito
La limusina de cristales tintados se detuvo frente a la escalinata del edificio de la Bolsa en Wall Street, en un escalón de la cual aguardaban desde hacía varios minutos Chester W. Holcombe y su elegante pero no poco feroz guardaespaldas, llamado Herbert. Éste señaló el lujoso vehículo, y su todopoderoso patrón la vio enseguida, asintió con un gesto de impaciencia, y comenzó a bajar los últimos escalones de piedra donde había estado esperando. El atlético Herbert lo precedió presu-rosamente, cruzó vigilante la acera y abrió con gesto servil la portezuela. Chester W. Holcombe se sentó en el amplio y confortable asiento tra-sero, todavía un tanto malhumorado. Aunque no tenía razón ni motivos para estar disgustado, pues llegar a la hora y minuto exactos a un punto concreto de la ciudad de Nueva York conduciendo una limusina era una proeza inalcanzable. Así que, en realidad, tenía que felicitar a Cindy, su rubia, guapa y eficaz choferesa que habitualmente lo recogía a la salida de uno de los edificios más famosos del mundo, donde se manejaban fortunas escalofriantes. (more…)